Tres planes de invierno para enamorarte, más aún, de Mallorca.
Las Islas Baleares tienen mucho más que sol y preciosas playas. Una escapada fuera de la temporada alta puede llenarte de sorpresas, todas positivas.
Precios más económicos, mayor disponibilidad de transportes y alojamientos, y sobre todo tranquilidad. La ausencia de turistas, convierten a estas islas en refugio de aquellos que quieren disfrutar de unos días relajados sin prescindir de la alegría propia de estos lugares vacacionales.
En el caso de Mallorca, la mayor de las islas, los meses de invierno son tan divertidos como durante el verano, con diferentes actividades para residentes y turistas.
Aquí te presento tres planes de invierno para enamorarte, más aún, de Mallorca.
Descubre la fiestas locales
En los meses de invierno se celebran algunas de las fiestas populares con más relevancia.
El 17 de Enero se celebra la festividad de Sant Antoni en numerosos municipios de la isla. Es la fiesta grande de algunos municipios como Sa Pobla, Manacor, Muro o Artá. Cada uno con sus propias tradiciones, en estos días la isla suele llenarse de demonios y hogueras (dimonis y foguerons), además de numerosas actividades.
En la víspera de Sant Antoni se encienden grandes hogueras, en las que alrededor danzan hombres enmascarados y demonios, como muestra de su triunfo sobre el mal.
También en Enero se celebra Sant Sebastià, patrón de Palma. A través de diferentes actividades, conciertos y fogatas, la ciudad homenajea a su santo. Durante la famosa “Revetla (verbena) de Sant Sebastià” numerosos grupos musicales de distintos ritmos y estilos amenizan la noche en plazas, calles y rincones de la capital.
En el mes de Febrero tiene lugar ‘Fira de la flor d’ametler’ (feria de la flor de almendro) en Son Servera y como no, el Carnaval. No puedes perderte el desfile de disfraces y carrozas en ‘Sa Rua’ de Palma.
De paseo por la Tramuntana
Uno de los tesoros mejor conservados de la isla es su espectacular sierra, la Serra de Tramuntana situada en la zona noroeste de Mallorca, y declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Adentrarse en ella no deja indiferente a nadie. Descubre preciosos pueblos como Sóller, Deià, Valldemossa, Foradada o Formentor, y paisajes tan espectaculares como el Mirador de Sa Creueta o el Torrent de Pareis. Tómatelo con calma, no intentes verlo todo en unos días, ya que la sierra es muy grande y existen muchas rutas de senderismo para conocerla más fondo.
Además, Mallorca es el paraíso de los ciclistas de carretera, por lo que si eres aficionado a este deporte, deja todo lo que estés haciendo y cómprate ahora mismo un vuelo y reserva tu alojamiento en alguno de los hoteles especializados en cicloturismo en Mallorca. ¡Vas a gozarlo!
Enamórate de Palma
Las calles de Palma. Pasea por ellas y descubre una ciudad sin turistas, llena de rincones con encanto y tiendas preciosas. Para completar el viaje, descubre el divertido ambiente del barrio de Santa Catalina.
Y si todavía no sabes qué es el tardeo, ya tienes la excusa perfecta para ir a descubrirlo a Mallorca este invierno.